Refúgiate en las melodías muertas de los corazones rotos por las distancias, quizás nunca fue la mejor opción.
Déjale llorar a tu corazón y no lo reprimas por temor a que las lágrimas nunca terminen de caer, algún día tiene que terminar.
Quítate el abrigo de protección que te dieron sus palabras y fuera la venda de los ojos que no te deja ver la realidad.
Sal de tu dulce utopía y enfrentate a lo que verdaderamente hay.
Desenmascara a los fantasmas del amor y del cariño, y dejales desnudos con su esqueleto de egoísmo y lujuria.
Puedes borrar los recuerdos, puedes vaciar tu memoria; Pero no puedo curar las heridas que dejas en mi corazón, ni puedo recoger las lágrimas derramadas por ti.
Quizás aun no es tarde... nunca es demasiado tarde.
Déjale llorar a tu corazón y no lo reprimas por temor a que las lágrimas nunca terminen de caer, algún día tiene que terminar.
Quítate el abrigo de protección que te dieron sus palabras y fuera la venda de los ojos que no te deja ver la realidad.
Sal de tu dulce utopía y enfrentate a lo que verdaderamente hay.
Desenmascara a los fantasmas del amor y del cariño, y dejales desnudos con su esqueleto de egoísmo y lujuria.
Puedes borrar los recuerdos, puedes vaciar tu memoria; Pero no puedo curar las heridas que dejas en mi corazón, ni puedo recoger las lágrimas derramadas por ti.
Quizás aun no es tarde... nunca es demasiado tarde.
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